Hoy vengo hablarte de uno de esos juegos que llevo tiempo siguiendo su pista. Undead Citadel, llama la atención por traer el combate basado en físicas, que hasta ahora prácticamente solo existían en los juegos tipo arena, a un modo para un solo jugador, con una campaña más tradicional. ¿Qué tal le sale la jugada? Ahora mismo te lo cuento.
El buen gusto de lo macabro
Lo primero que salta a la vista, nunca mejor dicho, es su apartado técnico. Un juego muy serio con bastante potencia gráfica. Los escenarios están muy bien recreados, con una ambientación típica de la fantasía oscura medieval. Los enemigos, aunque me suena haberlos visto ya en otros juegos, cumplen correctamente con el resto del entorno.
Por otra parte, el mapeado combina espacios abiertos con espacios cerrados, siendo más bien un juego pasillero. Eso sí, podemos entrar a muchas de las casas que veamos, pero con una breve pantalla de carga entre medias. Nada grave, aunque me recuerda a juegos de hace ya unos diez años. No es un problema, ni mucho menos.
En Undead Citadel puedes tocarlo todo
Una cosa fantástica es la interacción con el entorno, podemos tocar todo el inmobiliario, desde tirar mesas, abrir armarios, coger jarras, e incluso volcar estanterías completas. Es una pasada. Relacionado con esto, tenemos el combate, al estar basado en físicas, actúa de forma creíble la mayoría de veces, haciéndote sentir que llevas algo pesado en las manos.
Es cierto que tiene combates muy divertidos y espectaculares, donde el límite es tu habilidad física, aunque también hay momentos donde la física se vuelve totalmente loca, dejando estampas bastante cómicas. La fuerza de los golpes, de normal, funciona bien, menos las veces que lo interpreta como quiere. Aparte de las armas medievales, también tenemos unas pociones para ralentizar el tiempo y una especie de granadas que es un lujo lanzarlas.
No es oro todo lo que reluce
Lo que no llega al nivel, ni de cerca, es el sonido. Todo el rato que jugué, me faltaba feedback sonoro con las cosas, al caerse un armario, golpear, o incluso, un poco de viento para llenar ese silencio. Realmente pobre en este apartado y espero que lo cambien porque enturbia completamente la experiencia de inmersión. Aún así, estamos ante un juego que cumple, aunque para mi gusto, se queda algo lejos de lo que prometía. Actualmente, está disponible en Steam y esperemos verlo algún día en los visores de PICO y Meta.
En el pasado fui jugador profesional de videojuegos, actualmente creador de contenido. La realidad virtual abrió un nuevo mundo para mi, haciéndome vivir lo que antes me encantaba jugar.
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