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Crimen: Mercenary Tales, un juego muy troll

Porque no todo tiene porque ser realista, también hay espacio para juegos más arcade y que nos traen una idea más sencilla. Este es el caso de Crimen: Mercenary Tales, un juego arcade, con un estilo visual tipo cómic, donde nos embarcamos en peligrosas y sangrientas aventuras. No suena mal, ¿verdad?

En Crimen: Mercenary Tales, personajes de todo tipo nos contarán locas historias en las que seremos el protagonista de cada una de ellas. Todo esto guiado con historias con mucho sentido del humor, usando un gran número de referencias actuales. La parte mala, que no está doblado y hay algunas cosas que nos podemos perder en medio de los combates.

Crimen: Mercenary Tales, puro arcade

Como ya mencioné al principio de este artículo, Crimen: Mercenary Tales, es un juego muy arcade y no pretende ser otra cosa. Los combates son simples, pero divertidos, en los que los enemigos van cambiando de postura e intentando sorprendernos con sus ataques. Cada uno de estos ataques se bloquean de una forma diferente, haciendo que tengamos que estar muy atentos a la postura de los personajes que nos atacan.

Imagen de Crimen: Mercenary Tale, combatiendo contra tres enemigos a la vez

Gracioso pero sangriento

Una cosa que me sorprendió es lo sangriento que es, teniendo en cuenta el tono del juego, no me lo esperaba. Visualmente, cuenta con un estilo cómic haciéndolo resultón pero nada impactante, de hecho, hay algunos decorados que están hechos en 2D, como si un juego antiguo se tratase. Tengo dudas si está hecho por limitaciones o porque no se toma en serio así mismo.

Con Crimen: Mercenary Tales, pasarás ratos muy divertidos, sobre todo con sus locos diálogos. No revoluciona nada, pero tampoco lo pretende y lo que quiere hacer, cumple con creces. Actualmente este juego está disponible en los visores standalone Meta Quest 2/Pro y PICO 4.